No obstante, el COVID-19 se llevó a su madre de 66 años, quien llevaba el control de su dieta, por lo que ahora Franco y uno de sus hermanos deben hacerse cargo
Juan Pedro Franco pasó de enfrentar un enemigo a otro. En 2017 este mexicano obtuvo el récord Guinness como el hombre más gordo del mundo, y aunque bajó considerablemente su peligroso peso, tuvo que batallar contra el nuevo coronavirus.
Franco, de 36 años, llegó a pesar 595 kilos. Aunque ahora ronda los 208, los males que le trajo la obesidad -diabetes, hipertensión y enfermedad pulmonar obstructiva crónica- le jugaron en contra en la lucha contra el virus para el que dio positivo hace un mes.
«Es complicado porque es una enfermedad muy agresiva. Tuve dolor de cabeza, de cuerpo, se me iba el aire, calentura (fiebre). Era una persona con mucho riesgo».
Vía BluRadio