El presidente de la Cámara de Licoreros del estado Táchira, Johnson Delgado, advirtió que muchas licorerías y bodegones están en riesgos de cerrar debido a que las ventas han disminuido en 70%.
Señaló que el contrabando de bebidas es es otro factor que afecta gravemente a las licorerías venezolanas, además afirmó que «ha venido incursionando sobre todo en esta temporada navideña».
«Son comercializadas por personas que no tienen la permisología y que no pagan impuestos, mientras que el sector formal licorero paga impuestos al Seniat, a la gobernación, al municipio», dijo.
Estiman que en la entidad andina hay más de 300 mil ventas clandestinas de licor «causando daños al comercio formal».
En entrevista concedida a Unión Radio, recordó que este tipo de hechos inciden directamente en la generación de nuevos empleos y en los ya existentes.
Vía Uniònradio.net