El cardenal Baltazar Porras ratificó que en cada diócesis venezolana habrá una reliquia del doctor José Gregorio Hernández, cuya beatificación se espera para finales de abril
La clavícula derecha del nuevo beato venezolano es la reliquia que llevarán a El Vaticano. Como había anunciado el pasado 3 de noviembre el cardenal y arzobispo de la Arquidiócesis de Mérida, Baltazar Porras, cuando presentó el informe final de la exhumación de los restos del Venerable José Gregorio Hernández, “será la clavícula derecha la que se presentará ante El Vaticano como reliquia de primer orden”.
“En cada cada diócesis y arquidiócesis venezolana también habrá una reliquia auténtica del beato”, y expresó después mediante un protocolo, que hay que seguir, podrán tenerlas otros santuarios o templos que lleven el nombre de José Gregorio Hernández.
El cardenal Porras dijo que el relicario que se usará para el beato José Gregorio Hernández tendrá un modelo especial, será un microscopio antiguo con un sombrerito negro, como el que usaba el Venerable.
El relicario está en fase de construcción como una obra de las venezolanas Matilde Sánchez y María Teresa Aristiguieta, cuya propuesta es un microscopio de base, con un sombrero negro en el medio, una aureola de santo, con un denario del rosario, al cual fue devoto el nuevo beato.
Ese será el símbolo de la beatificación. El relicario con sombrero irá a la Santa Sede. El microscopio es la representación de la ciencia, agregó.
Dijo que en cada diócesis, igualmente, habrá un santuario diocesano para el resguardo de las reliquias del médico ilustre de Insotú.
